Laia Shamirian Freelance Food Writer

Armenia: un viaje culinario por las montañas que recorrió Vasili Grossman

Armenia, un país de montaña, pradera y monasterio ubicado en la región del Cáucaso, es conocido por su rica historia, cultura y, por supuesto, su deliciosa gastronomía. La cocina armenia es una mezcla de sabores de montaña y tradiciones culinarias ancestrales que han sido transmitidas de generación en generación. En este artículo, exploraremos los platos más representativos de Armenia y descubriremos los secretos de su cocina.

Historia de la cocina armenia

La historia de la cocina armenia se remonta a miles de años atrás, con evidencias arqueológicas que revelan la existencia de una cultura culinaria sofisticada en la región desde el Neolítico. La cocina armenia ha sido influenciada por las diferentes civilizaciones que han pasado por la región, como los asirios, los persas, los griegos, los romanos y los otomanos. Estas influencias han enriquecido la cocina armenia, que también ha logrado conservar una identidad única a lo largo de los milenios y la diáspora.

Ingredientes principales

La cocina armenia se caracteriza por el uso de ingredientes frescos y naturales, y gran parte de sus platos se basan en productos locales. Uno de los ingredientes más importantes en la cocina armenia es el trigo, que se utiliza para hacer panes, como lavash, pasteles y otros productos horneados. Y no sólo eso, uno de sus platos más famosos es el spa, que lejos de ser una piscina climatizada, es una sopa a base de yogur, hierbas y grano de trigo ideal para tomar fría o caliente.

Además del trigo, otros ingredientes comunes incluyen las verduras frescas como berenjenas, tomates, pimientos y pepinos, así como hierbas aromáticas como el cilantro, el perejil y el eneldo.

Platos emblemáticos

Tolma

El tolma es uno de los platos más emblemáticos de la cocina armenia. Consiste en hojas de parra rellenas de una mezcla de arroz, carne picada, cebolla, tomate, perejil y especias. Se cocina lentamente hasta que las hojas de parra estén tiernas y el relleno esté completamente cocido. El tolma se sirve caliente y se puede disfrutar como plato principal o como aperitivo.

Khorovats

El khorovats es el nombre armenio para la barbacoa y es uno de los platos más populares en Armenia. Se prepara con carne de cerdo, cordero o pollo, marinada en especias y luego asada a la parrilla. El khorovats se sirve con pan de lavash, un pan delgado tradicional, y se complementa con verduras frescas y ensaladas.

Lahmajoun

El lahmajoun es una especie de pizza armenia. Se hace con una masa fina y crujiente cubierta de una mezcla de carne picada, tomates, cebolla, pimientos y especias. Se hornea hasta que la masa esté dorada y crujiente. El lahmajoun se sirve con jugo de limón y se enrolla antes de comerlo.

Gatá el postre indispensable

La gata es un pastel dulce armenio que se elabora con una masa suave y esponjosa, rellena de joris una mezcla de mantequilla, harina y azúcar. En ocasiones también se incorporan nueces. Se hornea hasta que esté dorada y se sirve caliente con una taza de té de tomillo.

El término «Gata» proviene del idioma armenio y se refiere a cualquier tipo de pastel dulce. Sin embargo, el Gata armenio específicamente se caracteriza por su forma redonda y su relleno. Este postre ha evolucionado a lo largo del tiempo, pero se ha mantenido fiel a sus raíces tradicionales.

La historia del Gata está estrechamente vinculada con la historia y la geografía de Armenia. Durante siglos, Armenia ha sido un cruce de caminos entre Oriente y Occidente, y ha sido influenciada por diferentes culturas y civilizaciones. Estas influencias se reflejan en su gastronomía, incluyendo el Gata.

La elaboración del Gata ha sido transmitida de generación en generación, y cada familia armenia tiene su propia receta y técnica para hacerlo. La preparación del Gata implica la mezcla de ingredientes básicos como harina, azúcar, mantequilla, huevos y levadura. La masa resultante se estira y se rellena generosamente con nueces picadas y azúcar. Luego, se pliega la masa sobre el relleno para formar una especie de paquete redondo.

Una característica distintiva del Gata armenio es su decoración en la parte superior. Antes de hornear, se realiza un patrón en relieve en la masa, utilizando un molde especial llamado «Nazook». Los patrones típicos incluyen cruces, espirales o motivos florales, que se consideran símbolos de buena suerte y protección.

El Gata se hornea hasta que adquiera un color dorado y una textura suave y esponjosa. Es un postre que se disfruta en diferentes ocasiones, desde festividades religiosas hasta reuniones familiares.

Hoy en día, el Gata sigue siendo un elemento clave en la cultura culinaria armenia y es apreciado tanto por los locales como por los visitantes. En Barcelona puede reservarse un Gatá para 6 personas por menos de 10 euros en El Gust d’Armenia, Sagrera. 

Este artículo forma parte de la categoría “Cultura Gastronómica“. En esta sección encontrarás reportajes y artículos que abarcan la dimensión gastronómica de la fe, la política y las costumbres del mundo entero.

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